Cinelândia, 15 de julho. Nos dias 22 e 30 ocorreram novas manifestações nas ruas do Centro
Las organizaciones populares más combativas de Río de Janeiro, principalmente las que integran el Frente Independiente Popular (FIP-RJ), son blanco de una nefasta campaña de criminalización apócrifa del monopolio de la prensa, montajes, acusaciones infundadas y persecuciones policiales a mando del viejo Estado en las esferas del ejecutivo, legislativo y judicial.
Ya en la última edición de AND informamos las denuncias de la operación llevada a cabo el último día 12 de julio, víspera de la final de la Copa de la Fifa, cuando la Comisaría de Represión a los Crímenes de Informática (DRCI) de la Policía Civil cumplió mandatos de prisión, búsqueda y aprehensión contra 23 activistas, que tras algunos días fueron denunciados por el Ministerio Público bajo acusación de “asociación criminal”.
El día 19, recibimos en la redacción de AND incontables denuncias de que residencias, inclusive de amigos y familiares de activistas, estaban siendo invadidas e inspeccionadas por policías civiles. Los agentes de la represión buscaban activistas que poco antes habían sido puestos en libertad y recibieron nuevos mandados de prisión preventiva después del judiciario acatar denuncia del Ministerio Público.
Dieciocho de esos activistas perseguidos políticos no fueron encontrados en sus residencias y pasaron a ser cazados y considerados “forajidos”. Igor D’Icarahy (estudiante de Educación Física de la UERJ), Camila Jourdan (profesora y coordinadora del Programa de Pos-Graduación en Filosofía de la UERJ) y Elisa Quadros (cineasta) permanecían, hasta entonces, encarcelados.
En 23 de julio, el juez Siro Darlan, de la 7ª Cámara Criminal del Tribunal de Justicia, concedió habeas corpus para los 23 activistas argumentando que las prisiones preventivas expedidas por el juez Flávio Itabaiana no estaban amparadas en requisitos legales.
En el inicio de la noche de 24 de julio, después de intensa campaña de denuncia realizada por familiares, abogados, organizaciones democráticas y de defensa de los derechos del pueblo nacionales e internacionales, los tres activistas que aún eran mantenidos presos fueron puestos en libertad, aun así casi 24 horas después del habeas corpus haber sido acogido. Con carteles y entonando lemas, durante todo el día, parientes, amigos y activistas de diversos movimientos populares se mantuvieron movilizados en la entrada del Complejo Penitenciario de Gericinó, en Bangu, en la Zona Oeste, aguardando la liberación de los jóvenes, que fueron acogidos con enorme alegría.
Cuando estaban siendo liberados y dirigiéndose para los coches que los aguardaban próximos a la penitenciaria, las hienas del monopolio de la prensa avanzaron sobre los activistas en búsqueda de imágenes y fueron repelidos por los que exigían respeto y privacidad en aquel momento.
La versión vendida por los vehículos del monopolio de que activistas habrían agredido periodistas es desmentida por el registro hecho por incontables personas presentes en el momento y que circulan en internet.
Durante esos días de caza a las brujas, persecución política y montajes, ocurrieron nuevos hechos “espectaculares” de emisoras como la Red Globo, que tuvo acceso a procesos que corrían en secreto de justicia y eran negados inclusive a los abogados de los presos. Divulgaron tramos de documentos, audios e imágenes editados para intentar criminalizar los activistas.
Inclusive relaciones personales entre activistas esos señores y señoras exploraron, en la tentativa de criminalizar y demonizar hasta moralmente la juventud combatiente, con las mismas características de las históricas persecuciones fascistas.
Pero existe una ley de hierro en la historia que dice: “donde hay opresión hay resistencia”. Personalidades democráticas, juristas, sindicatos, asociaciones, administraciones de universidades, profesores, organizaciones estudiantiles, órganos democráticos de prensa del Brasil y del exterior, familiares de los presos y perseguidos políticos, etc., se movilizan, realizan actividades, panfleteos y lanzan notas de apoyo y solidaridad. Los días 15 y 22 de julio, el lema ‘¡Libertad para todos los presos políticos! Luchar no es crimen’ movilizó miles de personas en Río de Janeiro, en las mayores manifestaciones de los últimos meses en la ciudad.
Acto público en la UFRJ
En la noche de 25 de julio, fue realizado el ‘Acto Público Por la Liberación de Todos los Presos Políticos y pelo Cancelación de Todos los Procesos’ en el salón noble del Instituto de Filosofía y Ciencias Sociales (IFCS) de la UFRJ, en el Largo de São Francisco, Centro de Río de Janeiro.
El acto fue convocado por el Frente Independiente Popular en conjunto con el Centro Brasileño de Solidaridad a los Pueblos (Cebraspo) y el Grupo Tortura Nunca Más. En la mesa estuvieron presentes, además de miembros de las organizaciones que convocaron el evento, representantes del Instituto de Defensores de los Derechos Humanos (IDDH), de la Red de Comunidades y Movimientos Contra la Violencia, de la Aldea Maracanã, representante del movimiento de los barrenderos, la Comisión de Familiares de los Presos Políticos, y Marino D’Icarahy, abogado de los perseguidos políticos.
Activistas que habían sido recién liberados hablaron a los presentes reafirmando la justeza de su lucha, denunciando la persecución fascista y los días pasados en la prisión.
La estudiante secundaria Andressa Feitosa, 16 años, relató agresiones físicas contra ella y otras presas en el Departamento General de Acciones Socio Educativas (Degase). Su comportamiento ejemplar en la prisión desmoralizó los carceleros, que durante todo el tiempo hacían provocaciones. Ella dijo que la violencia contra las jóvenes presas “comunes” era rutinera.
— Cuando yo entré [en la prisión] yo tenía dos caminos. O me quedo quieta esperando salir de aquí, dando una de “desgraciada”, o yo voy a hacer un trabajo de propaganda y de base — afirmó la adolescente, que organizó manifestaciones en la celda contra las irregularidades presenciadas. Ella nos contó inclusive, que debido a su insistencia, llegó a sufrir retaliaciones de carceleros. Encapuzados, ellos la amenazaron y lanzaron spray de pimenta. La joven no se intimidó y permaneció firme hasta el fin.
— Allá dentro presenciamos torturas y yo creo que ellos lo hicieron de propósito. Ellos nos aislaron y ninguna presa podía hablar con nosotras de ninguna forma. Si ellas hablaran iban para castigo. Y ellos [los carceleros] comenzaron a castigarlas al lado de nuestra celda. Y el castigo es hambre y frío. Es muy frío y no pueden entrar abrigos — dijo Elisa Quadros “Sininho”, activista que estaba presa en Bangu y que ha sido blanco de las más variadas calumnias por parte de los periódicos y redes de televisión del monopolio.
El salón noble del IFCS quedó repleto en ese acto vibrante, marcado por consignas, canciones de lucha y por el contundente testimonio de los presentes, lo que muestra el reconocimiento de las organizaciones que luchan en Río de Janeiro de la justeza de las protestas y de la necesidad de seguir avanzando en esas luchas.
Imágenes del acto y de los testimonios pueden ser vistos en el vídeo de la Mídia Independiente Colectiva (MIC) publicado en el YouTube en 26/7: www.youtube.com.
Interrogatorio político y persecuciones
Las miles de páginas de las investigaciones policiales son, como demuestran denuncias publicadas en las redes sociales, rellenadas de ‘perlas’ típicas de los regímenes fascistas. Ni mismo Mikhail Bakunin, exponente anarquista fallecido en 1876, escapó. Él fue citado por un manifestante en un mensaje interceptado por la policía, pasando a ser considerado “potencial sospechoso”.
En las casas de los activistas presos en 12 de julio fueron incautados panfletos, periódicos y banderas, usados como “pruebas”. Tal como en el Estado Nuevo de Getúlio Vargas y en el régimen militar fascista, las palabras ‘comunista’ y ‘anarquista” son, en las descripciones del interrogatorio político, usadas para calificar tal o cual organización como un peligro a la “orden pública”.
De acuerdo con denuncia de activistas que tuvieron sus pertenencias incautadas y la pretensa lista de esas aprehensiones divulgada por el monopolio de las comunicaciones, varios ítems citados habrían sido plantados por los policías para incriminarlos.
Los activistas fueron detenidos debido al “peligro potencial” que representan, según evaluación de las fuerzas de represión y agentes del viejo Estado y puestos en libertad debido a falta de amparo legal para las prisiones.
El día 29 de julio, el juez Riscalla Abdenur, del Ministerio Público del Estado del Río de Janeiro, entró con un agravo regimental dirigido al juez Siro Darlan pidiendo reconsideración de la decisión que concedió habeas corpus a 23 activistas, objetivando encarcelar, una vez más, los jóvenes luchadores de nuestro pueblo.
En 30 de julio fue realizado el ‘Acto Nacional Protestar No es Crimen’ (materia de esta edición). Seguiremos acompañando los acontecimientos y divulgando las novedades en nuestra fan page en el Facebook (facebook.com/jornalanovademocracia).