Uma retomada histórica de tierrasocurriórecientemente em Corumbiara. La Hacienda Santa Elina , palco de uno de los mayores conflictos por la posesión de la tierra en la historia de nuestro país fue retomada por los campesinos. Las familias sobrevivientes de aquella que quedó conocida como "la masacre de Corumbiara" cumplieron la palabra empeñada a casi 13 años atrás de volver para Santa Elina y conquistar la tierra por la cual siempre lucharon.
Vítimas de Santa Elina acampadas em Brasília
Un comunicado del Codevise — Comité de Defensa de las Víctimas de Santa Elina anunció la reciente retomada de las tierras de la Santa Elina por más de cien familias campesinas. La toma del latifundio ocurrió en el 11 de mayo último y la noticia corrió rápidamente como en un camino de pólvora por todo el estado de Rondonia, atrayendo centenas de familias remanecientes de la lucha de 1995 y otras posteriores.
Las tierras de la Santa Elina son una reivindicación histórica de los campesinos pobres de Rondonia. La decisión por la retomada desde la batalla de 9 de agosto de 1995, cuando las tropas paramilitares compuestas por policías y bandos de pistoleros, al mando del entonces gobernador del estado Valdir Raupp y del latifundista Antenor Duarte, atacaron las 600 familias que ocupaban el área. Lo que impidió una masacre de proporciones mayores fue la organización y resistencia de las familias que recuerdan el hecho en el comunicado:
"Resistimos como pudimos con hoces, moto sierras, y pedazos de palos, pero después que fuimos dominados, asistimos las ejecuciones sumarias y sufrimos innúmeras torturas. En este caso que tuvo repercusión internacional fueron asesinados 9 de nuestros compañeros, incluyendo la pequeña Vanesa de 7 años de edad, varios desaparecidos, además de mutilados y otras secuelas físicas y sicológicas."
Basta de promesas
Enseguida después de la masacre, Luiz Inacio, entonces candidato a la presidencia de la república, visitó la hacienda Santa Elina y prometió a aquellas familias que "si un día fuese electo" haría justicia, indemnizaría las familias y entregaría aquellas tierras.
1995, primeiro acampamento
En el mes de agosto de 2007, con el apoyo de la Liga de los Campesinos Pobres, el Codevise organizó una comitiva de las víctimas de Santa Elina que fue hasta Brasilia para cobrar el cumplimiento de la promesa. Luiz Inacio ni siquiera recibió las familias para las que había prometido tierra y justicia. En la ocasión, la Comisión Especial de Derechos Humanos y el Ministro de Derechos Humanos Paulo Vannuchi prometieron la solución de las reivindicaciones de los campesinos en un plazo de dos meses. Algunos días después el ministro se dirigió a Rondonia y se reunió en la sede del Incra con las "autoridades" del Estado. Ninguna de las promesas de la gerencia FMI-PT fue cumplida y hasta hoy las familias continúan exigiendo las indemnizaciones, el corte de la hacienda Santa Elina y la distribución de sus tierras para las familias.
Basta de esperar
Reproducimos un trecho del comunicado del Codevise:
— Cansados de ver nuestros compañeros lisiados por balas, nuestros hijos con los ojos quemados por gas lacrimógeno, no aceptamos más falsas promesas. Entramos en la hacienda Santa Elina y ya somos más de 100 familias, a cada hora llegan más. Queremos saber ahora cuales medidas los gobiernos estadual y federal van a tomar. ¿Mandar la policía con pistoleros para masacrarnos como hizo en 1995?
Luiz Inácio, dias após o massacre, promete indenizar famílias quando fosse presidente
Cualquier cosa que venga a suceder a las familias será responsabilidad de la Comisión de Derechos Humanos, del ministro Vannuchi, del gobernador Ivo Cassol y del presidente Lula. Hasta hoy nuestros derechos no vienen siendo respetados.
La hacienda Santa Elina es un símbolo de la masacre de trabajadores en Brasil y su división significará un nuevo horizonte ante tantas injusticias y masacres realizadas por el latifundio en nuestro país. Nada nos hará desistir de ella, vamos cortarla cueste lo que costar."
Traducciones: [email protected]