Traducido por Enrique F.Chiappa

Este rojo,
nace el sol,
sobre China
surge Mao

En la vieja China el obscurecimiento y la tristeza envolvían la tierra y el cielo. El pueblo vivía entristecido por causa de la miseria, topando contra el imperialismo, el feudalismo y el capitalismo burocrático. Pero llegó el día en que ese mismo pueblo, en olas sucesivas, se irguió para protestar y luchar.

Con esas palabras del narrador se inicia la primera escena de El Este es Rojo, una de las más brillantes piezas de la literatura y del arte revolucionarias del proletariado internacional. Ella llega al pueblo chino en 1965, en la forma de una opera total, cuyo elenco parecía no caber de una sola vez en el palco del mayor edificio de Pekín destinado a presentaciones de espectáculos de esa naturaleza.

Dongfang hong, titulo original de El Este es Rojo, tiene como director Wang Poing. Esa ópera total, con125 minutos de duración engloba teatro, una inmensa orquesta, un coral de aproximadamente 600 componentes, los más renombrados cantores solos de toda China, técnicas circenses (en particular la acrobacia), cine, pictórica y una incomparable fidelidad a la causa del pueblo y a la ciencia. En total, más de 3 mil personas, entre alumnos, trabajadores y funcionarios del arte de Pekín tomaron parte en las presentaciones.

La ópera tiene como título homónimo la canción que se tornó, de hecho, el himno de la República Popular de China durante la Gran Revolución Cultural. La letra es atribuida a Li Youyan, un agricultor del norte de Shanshi, y la música fue compuesta a partir de una canción folclórica local.

Después que la camarilla de Teng Shiao ping asumió el poder — promoviendo la restauración del capitalismo y eliminando millares y millares de cuadros del Partido Comunista de China, en razón de las vinculaciones de la canción con la Revolución Cultural y de hacer el "culto a la personalidad" del Presidente Mao Tsetung — ella fue prohibida y muy raramente oída. El Este es Rojo fue substituida por la Marcha de los Voluntarios, cuya letra no menciona el Partido Comunista, ni al Presidente Mao.

De los artistas, literatos, y trabajadores científicos del pueblo, de los operarios, campesinos y soldados de todas las regiones, vinieron contribuciones para la montaje y realización de aquella obra que marcó un gran momento en la expresión de la República Popular y del Socialismo en bases científicas sobre la dirección del proletariado revolucionario.

Cuando El Este es Rojo fue ensenado, el famoso confronto sino soviético ya se había realizado (período de 14 de junio de 1963 a 14 de julio de 1964). Los debates tuvieron inicio con una carta de 25 Puntos y concluido con el noveno comentario (de una serie de nueve artículos — entre 6 de setiembre 1963 y 14 de julio 1964), en que el Partido comunista de China criticó duramente el revisionismo y la restauración capitalista en la URSS.

Encarnizada lucha

Las posiciones defendidas por el ala revolucionaria del Partido Comunista de China, dirigida por el Presidente Mao Tsetung, fueron terriblemente reprimidas por los bandos pro-Kruschov, entonces mayoría, en el conjunto de los partidos comunistas del mundo entero.

El Este es Rojo, entre otras manifestaciones culturales que antecedieron la deflagración de la Gran Revolución Cultural Proletaria, surgió despreciando las orientaciones para la literatura y el arte emanadas de los bandidos que, también en China, se encontraban en el aparato del Estado y del gobierno preparando un gran golpe contra el proletariado. Mismo que la victoria de los revisionistas fuese inevitable — y rematase su último y definitivo golpe en octubre de 1976 — la revolución cultural atormentó durante diez años aquellos que conspiraban contra el pueblo chino y buscaban la restauración capitalista en China, además de traer grandes enseñamientos al proletariado del mundo entero.

Al anteceder a la Revolución Cultural, el Presidente Mao concluía:

"La cultura imperialista y la cultura semi-feudal son dos hermanas muy unidas que hicieron una alianza reaccionaria para se oponer a la nueva cultura china. Esas culturas reaccionarias están al servicio de los imperialistas y de la clase feudal y deben ser destruidas. De otro modo, será imposible edificar una nueva cultura. Sin destrucción, no hay construcción; sin represa, no hay corriente; sin reposo, no hay movimiento. Está declarada una lucha hasta la muerte entre la nueva cultura y las culturas reaccionarias".

Con efecto, por esa época los revisionistas se esforzaron para montar diversos géneros de piezas venenosas, un amontonado de historias desde el punto de vista de la cultura feudal y burguesa. Por ejemplo, la Compañía nº 1 de la Opera de Pekín se mantuvo por mucho tiempo bajo el poder de la "línea negra revisionista". Por esa razón, los "emperadores, reyes, generales, ministros, pajes, doncellas y otros genios malquistos" eran impuestos como personajes más importantes en los diversos géneros de óperas montadas por más de 2.800 compañías, grupos profesionales y conjuntos artísticos — explicaba la señora Chiang Ching, una de las más destacadas personalidades dirigentes del pueblo chino y que pasó a dirigir la Compañía nº 1 en 1963. Todavía, la revolución en la Opera de Pekín continuó siendo acosada por toda suerte de intrigas, sabotajes y represiones abiertas dirigidas principalmente por los kruschoves de China.

Uno de los episodios marcadores de la lucha entre la revolución y la contrarrevolución en el teatro ocurrió cuando de la presentación de La centella en las cañuelas obteniendo un retumbante suceso, asistida inclusive por el propio Presidente Mao que felicitó los actores e hizo algunas recomendaciones.

Como respuesta, la parte de los bandidos revisionistas unidas a la cuadrilla de Liu Shao shi, desencadenó una fuerte campaña de intrigas y sabotajes contra la Compañía nº 1. Llegó al punto de impedir que artistas y técnicos se mezclasen al pueblo en sus estudios, simulando visitas de artistas al campo, adulterando fotos que publicaban en los periódicos.

Esas cuadrillas también minaban insidiosa y criminalmente las decisiones adoptadas por la dirección del Partido Comunista de China de desencadenar la Gran Revolución Cultural Proletaria, retardando e interrumpiendo medidas y acciones desarrolladas por el Partido

En la literatura y en el arte, para confundir orientaciones revolucionarias, esos bandos que se servían de las armas trotskistas, del misticismo feudal y del fascismo de una manera general imponían la teoría de los tres géneros simultáneos: "piezas tradicionales, de temas contemporáneos y de nuevas piezas históricas."

En el caso del arte tradicional, cuando alegaban oposición a ese tipo de arte, lo hacían por pura intriga, en realidad para oponerse a los revolucionarios proletarios- entre ellos, la dirigente Chiang Ching. Como los revisionistas no podían negar que la historia milenaria de china debía ser profundamente estudiada, así como su arte, negaban el método científico de investigación y análisis.

Claro que es necesario preservar una buena obra original antigua, pero es decisivo analizar su tendencia política y, al presentarla, elevar cuidadosamente sus cualidades — inclusive "sin buscar hacer las alteraciones superfluas, mientras los defectos deben ser corregidos" como observaba la señora Chiang Ching. De hecho, no cabe hacer con que los personajes reaccionarios pasen como progresistas o revolucionarios, tampoco inventar personajes de vanguardia en la historia milenaria china y en su arte, pero descubrirlos y reconocerlos. Además, por acaso también, ¿hubo alguna época en que el pueblo fue retrógrado o minoría en la sociedad?

¿Por acaso los revolucionarios deberían se utilizar del método metafísico de análisis e investigación, del estilo feudal e imperialista de la narrativa, encima de cualquier crítica sobre pretexto de preservar el arte tradicional? ¿Qué tradiciones nos interesan: la de los reaccionarios o las del pueblo progresista y revolucionario?

Los revisionistas utilizaban artificios muy sutiles de huir de la discusión sobre la lucha entre las artes feudales e imperialistas por un lado y el arte revolucionaria proletaria por la otra. Eran formas de mantener el arte (parte de la superestructura) atrasada, incapaz de corresponder y apoyar los objetivos de la base económica del socialismo, saboteándolo, por lo tanto.

¿Crear sobre que bases?

La gran revolucionaria Chiang Ching, esposa del Presidente Mao Tsetung, explicaba ser inconcebible que pasados 15 años desde la fundación de la gloriosa y amada Republica Popular de China, entonces casi 600 millones de operarios, campesinos y soldados revolucionarios (entre los que todo producen y los que defienden el pueblo sin vivir a sus costas, al contrario del ejercito burgués), todavía no estuviesen representados en la literatura y en el arte- pero que una minoría con sus concepciones contrarrevolucionarias fuesen personajes de los enredos más importantes.

Llegara el momento en que las óperas (artes profundas), servir verdaderamente a la época actual. Si finalmente la ciencia de la lucha de clases desvendara toda la génesis de la economía, dialéctica y de la historia de la sociedad ¿por se recusar a revelar la realidad a las masas — cuando la realidad misma nada más es que el conjunto de las necesidades, imposibles de ser contornadas, del pueblo, mientras que la libertad es la conciencia de esa realidad producida en medio a la lucha de las masas?

También no era posible evaluar una pieza a partir del montaje, cuando todo ya estaba hecho y poco podría ser modificado. Era necesario conocer los textos en su contenido político que mereciesen una verdadera creación artística, ya que no es posible crear algo a base de textos que van del retrógrado al contrarrevolucionario.

La señora Chiang Ching profundizaba sus explicaciones afirmando que para resolver la cuestión de la creación "es necesario realizar la tripla asociación de la dirección, de los artistas profesionales y de las masa profesionales". Vale decir, es necesario entender la vida de las masas y de sus causas más justas para tomar el partido de las masas, en el pasado y en el tiempo presente, por más breve que sea el instante enfocado. Pero sin realizar la asociación revolucionaria entre la dirección, los artistas y las masas populares , de la misma forma, jamás habrá arte.

Claro que los conocimientos y las orientaciones de esa grande revolucionaria iban mucho más lejos, y mismo los trechos aquí citados aparecen en la contra capa A propósito de la revolución en la Opera de Pekín, tres años después del lanzamiento de El Este es rojo. Pero eso nos basta, por ahora, para recordarnos determinados aspectos de la obra y en que circunstancias políticas ella se tornó posible.

Cena primera

La primera cena de El Este es rojo trae momentos conmovedores, reveladores de las relaciones de explotación más vil y humillante — desde las condiciones sorprendentemente crueles en que los cargadores son obligados a transportar centenas de cajas de seda para los navíos ingleses, la separación de los parientes más queridos para tentar la sobrevivencia de los hijos del proletariado chino. Del otro lado, la bajeza de los gerentes coloniales, capataces y policías, y el lucro cierto de los señores feudales, de la burguesía compradora y del imperialismo.

En medio a las estupendas lecciones de técnicas teatrales, los artistas del pueblo hacen llegar la noticia de la revolución bolchevique, Octubre de 1917; la eclosión del movimiento 4 de Mayo, en 1919; la fundación del Partido Comunista de China, en 1921. En ese mismo año, surge el gobierno de Cantón, cuyo presidente era el líder revolucionario Dr. Sun Yat-sem. Enseguida operarios y campesinos establecen una inquebrantable alianza y comienzan a desalojar los latifundistas.

El partido Kuomintang, de Sun Yat-sen, recibe apoyo del Partido Comunista de China, en 1923. Chiang Kai-shek, joven militar que retorna a su país después de concluir estudios en la entonces Federación de las Repúblicas Socialistas Soviéticas, asume el comando de la Academia Militar de Wampoa, que se constituye en el núcleo del ejército revolucionario de Kuomintang, en 1924. Fallece el Dr. Sun Yat-sen en 1925 y Chiang Kai-shek asume el control de Kuomintang, creciendo las contradicciones entre comunistas y nacionalistas en el interior del partido burgués.

Tiene inicio la expedición al Norte con el apoyo entusiasta de las masas campesinas, en 1926. En este mismo año, Chiang Kai-shek prende innúmeros comunistas. En 1927, fuerzas dirigidas por Chu En-lai son destrozadas por Kuomintang.

En 12 de abril del mismo año, en Pekín, Chiang Kai-shek traiciona la revolución. Kuomintang desencadena una violenta represión, utilizándose de campañas de cerco y aniquilamiento, de inmediato abatiendo 5 mil personas, entre comunistas y aliados. Chu En-lai es libertado por mediación. Entre mayo y junio de 1927, nuevo baño de sangre contra comunistas. Episodios que incluyen la traición de la "izquierda" del Kuomintang se arrastran hasta fines de 1930, con un total de 140mil revolucionarios asesinados.

Cena II

Narrador:

La sangre de los héroes tiñe de rojo todos los ríos de la patria. Pero los comunistas jamás se dejan intimidar. Ellos se irguen. Sepultan los camaradas y vuelven a la lucha.

Con los combates de Nanchang hay una revuelta, como en los primeros días de la primavera, con el camarada Mao liderando, en persona, el Levante de la Cosecha de Otoño.

Se enciende la primera antorcha y se establece la primera base de apoyo revolucionaria en el país. La tempestad de la lucha armada reverbera lejos, allende las márgenes del Yang Tse.

Las fuerzas revolucionarias dan las manos en las montañas de Chingkang. El gran Mao enseña a nuestros líderes nuevas prácticas revolucionarias.

En 1928, columnas comunistas lideradas por Mao Tsetung y Chu Teh se funden en Chingkanshan, dando origen al Ejército Rojo de China y, después el Congreso en ese año, surgen las 8 Reglas del Ejército Rojo. En aquellos días, Chu Teh se convertía en genio militar y el Presidente Mao en el teórico político máximo de la revolución en China.

Progresan en las bases de apoyo los planos meticulosos de profundización del poder, de la economía y de la cultura de las amplias masas, mientras Chiang Kai-shek acumulaba fortunas, burocracia y entrenaba tropas reaccionarias en las áreas bajo su gobierno. En enero de 1930, en la provincia de Fukien, el Presidente Mao es reconocido como líder máximo de la revolución en China. También, en el inicio de ese año, es establecida la organización militar del ejército rojo, con efectivos divididos en cuatro cuerpos, sumando 30 mil hombres. El comité central ejecutivo del Partido Comunista de China es reorganizado con un consejo militar revolucionario. Antes de terminar el año, Chu Teh organiza pequeñas unidades y golpean 100 mil soldados de Chiang Kai-shek agrupados y ocho divisiones que se dirigía contra las bases de apoyo de Hunam y Oyuwan. Chu Teh hace 10 mil prisioneros.

Acontecen la segunda y terceras campañas de cerco y aniquilamiento, todavía con la victoria del ejército operario y campesino. En la tercera campaña, Chiang Kai-shek había reducido las fuerzas de Chu-teh de 30 mil para 20 mil hombres, al mismo tiempo en que posibilitó a los japoneses invadir Mukden en setiembre de 1931. El Presidente Mao declaró guerra al Japón. Cerca de 20 soldados nacionalistas del 28º ejército de Kuomintang desertaron e ingresaron en el ejército operario y campesino de Mao Tsetung. En abril de 1932, Chiang Kai-shek dispone de 500 mil hombres para buscar, en su cuarta campaña de cerco y aniquilamiento, destruir el ejército operario y campesino, reculando todavía en enero de 1933.

Una quinta campaña es desechada por Kuomintang, con asesoramiento técnico del general alemán von Seeckt. La campaña se extendió hasta 1934, teniendo Chiang Kai-shek abandonado toda la resistencia al Japón que se apoderó de Manchuria.

Cena III

Narrador:

Cruzando millares de montañas y ríos la revolución prosigue victoriosa.

Las bases rojas se multiplican. ¡Oportunistas, mantengan distancia de la Revolución! Pero, una vez más corre peligro nuestra causa. En este momento crucial hay una conferencia en Tsunyi. Se dispensa una neblina pesada. Mao Tsetung, nuestro gran timonero, coloca el barco en el rumbo cierto. Se desvía de las correderas turbulentas y nos lleva en la dirección de la victoria. La Larga Marcha también es una máquina que propaga semillas de revolución para que broten, florezcan y fructifiquen.

El débil se torna fuerte

"Cuando el enemigo avanza, nos retiramos. Cuando se detiene, lo acosamos. Cuando se retira, lo perseguimos". Sin se apartar de los principios militares establecidos por el Presidente Mao, y habiéndose preparado entre una campaña y otra, el Ejército Rojo preparó su marcha de combates para las montañas de Shensi, a más de 10 mil kilómetros de distancia, andando una media de 40 kilómetros por día.

El I, II, y III ejércitos de los campesinos se juntara al Ejército Rojo y victoriosamente completaron la Larga Marcha de 25 mil lis*. Desde mediados de 1934, ese ejército venció 18 cadenas de altas montañas, cinco de ellas cubiertas de nieve; atravesó 24 grandes ríos profundos y tormentosos; doce provincias localizadas en regiones inhóspitas, en las cuales ocupó temporalmente 62 ciudades, llegando Shensi del Norte en octubre de 1935, donde estableció sus imbatibles bases de apoyo del gran noroeste.

Cena IV

Narrador:

El pueblo chino se concentra en la guerra contra la opresión japonesa.

El Partido Comunista de China expide una convocación para el fin de todos los confrontes internos y la unión contra los japoneses. Los reaccionarios de Chiang Kai-shek, contrariando todos los intereses del pueblo, caen de rodillas delante de los japoneses, entregándoles muchas regiones de nuestra tierra sagrada. Millones de personas pierden entes queridos, otras millones son forzadas a abandonar sus hogares.

Conducido por el Partido, el pueblo organiza el movimiento patriótico de 9 de Diciembre para resistir a la agresión y salvar el país. El punto de concentración de la resistencia es en la margen del Río Amarillo.

Los japoneses comienzan a ser derrotados, pero los reaccionarios de Kuomintang todavía bloquean las áreas libertadas y buscan vencer los chinos por hambre y cansancio. Pero, no hay fuerza en el mundo, capaz de detener el pueblo revolucionario. El ejército y el pueblo se funden en un gran esfuerzo de producción.

La guerra anti-japonesa

Con aproximadamente 35 mil combatientes, el Ejército Rojo defendió la región comprendida por las provincias de Kansu, Suiyuan y Shensi. Al sur de Shensi, 15 mil soldados de Chiang lanzaban ataques aislados contra el ejército del pueblo chino. Por tras de las líneas de Chiang, entretanto, fuerzas japonesas atacaban Kuomintang. Hábilmente, el ejército rojo cesó sus hostilidades a las desgastadas fuerzas de Kuomintang. Reunió cuadros civiles y militares, desenvolvió sus industrias y agricultura, creó una escuela militar.

Ocupada desde 1931 por los japoneses, Manchuria asiste a los refuerzos imperialistas que llegan a su territorio constantemente hasta el mes de marzo de 1932, cuando – por "mediación "británica – los japoneses se retiran. El ejército revolucionario se expande constantemente, en ese período. Ya al final de 1936, 100 mil combatientes revolucionarios ocupan el norte de Shensi.

En enero de 1937, Yenan fue declarada capital de la República Popular de China.

Nanking era la sede del gobierno de Kuomintang.

Después de los incidentes creados por los propios japoneses para justificar una serie de masacres por ellos perpetrados, en 30 de julio de 1937, el ejército imperial japonés ocupa Pekín y en 13 de diciembre del mismo año, Nanking. En el mismo año, en Shensi, las tropas japonesas son derrotadas en setiembre y octubre. Enseguida, ellas desencadenan una gran ofensiva en todas las frentes. En 1939, los efectivos bajo el mando de Presidente Mao ocupaban extensos territorios y en ellos establecían el poder operario y campesino. Chiang Kai-shek pretendía que el ejército rojo se desgastase en el enfrentamiento con el ejército japonés, para aliarse a los japoneses y destruir el ejército rojo. Pero las tropas revolucionarias obligaron que justamente Kuomintang desempeñase el desgastado papel, mientras el ejército rojo se fortalecía para enfrentar ambos enemigos.

En 1930, el Ejército Rojo de operarios y campesinos contaba con medio millón de hombres guiados por una invencible línea política. Además bien armados y entrenados. La ofensiva contra los japoneses fue lanzada, de forma intermitente y segura, llevando a pérdidas al ejército japonés que sumaran 50 mil hombres, entre japoneses y chinos obligados a luchar a su lado. Al desastre imperialista, se acrecentaban pérdidas de innúmeros puestos fortificados, kilómetros de vías de tren y el dominio político de inmensas regiones. Entre 1939 y 40, el Presidente Mao Tsetung se torna el líder incontestable de los comunistas y del pueblo chino.

En 1941, la Segunda Guerra Mundial se generaliza. En 1941, USA lanza una serie de provocaciones contra los japoneses, obligándolos a atacar la base yanqui Pearl Harbor, en el Pacífico. De 1942, 43 y 44, los comunistas amplían su rayo de acción, gradualmente desarrollan la producción, el abastecimiento de armas y municiones. Preocupados con las islas en el Pacífico, los japoneses dan prioridad a la defensiva en China, mientras la saquean poniendo en práctica la consigna "robar todo, quemar todo, matar a todos".

El Poder operario y campesino avanza. Crece el Partido, las regiones libertadas, son ampliadas las escuelas de cuadros políticos y militares. En 1944, solamente en el noroeste de China el Poder que abarcaba Shansi-Cahar-Hopei incluía 20 millones de habitantes.

Cena V

Narrador:

El fin sepulcral de la dinastía Chiang.

Delante de la resistencia, Chiang Kai-shek se esconde en las montañas. Pero luego los chinos llegan a la victoria. Ese traidor, apoyado por el imperialismo de USA, desencadena una guerra civil. En el interior de las áreas de Kuomintang el pueblo se levanta contra la guerra civil y la persecución.

Los portones de hierro de las prisiones no son capaces de contener el ímpetu de la resistencia. El agua de los depósitos de la policía no basta para apagar las llamas de los corazones del pueblo.

Contando con millares de soldados, armas y aviones suministrados por los imperialistas de USA, Chiang Kai-shek imagina vencer. Se traba entonces una gran batalla decisiva entre dos destinos y dos futuros.

El Presidente Mao Tsetung lanza la gran convocación: ¡Fuera Chiang! ¡Ahora, libertaremos toda la China!

Período de guerra civil

Era 1945. Concluida la Segunda Guerra Mundial, los efectivos de Kuomintang sumaban 280 brigadas, un total de 2,5 millones de soldados, contando todavía con una pequeña marina y quinientos aviones. Los comunistas llegaban a 300 mil soldados, apoyados por 700 mil guerrilleros. Toda la administración pública de Chiang estaba minada por la administración comunista. Los revolucionarios aguardaban apenas la orden de ataque. En 30 de junio de 1946, la guerra civil estaba cristalizada. Entre julio y agosto, las fuerzas comunistas parecían recular, pero en realidad se fortalecía entre las masas, creando las posibilidades de todo el pueblo envolverse en la guerra. En términos efectivos militares, Kuomintang parecía estar en mayoría, una vez que disponía de 2,6 millones de soldados, mientras el ejército rojo de apenas un millón.

Cena VI

Narrador:

El pueblo chino se irgue.

¿Se recuerdan del atardecer sombrío, cuando tronaban los cañones y soñábamos con el día de la victoria?

Pues ese día llegó. Lágrimas de felicidad brotan de los ojos del pueblo. Todos están felices. Todos atienden al llamado del Presidente Mao. Nace la República Popular de China. ¡El pueblo chino se levantó!

10 de mayo de 1947. El ejército operario y campesino lanza una estupenda ofensiva por toda China. En diciembre del mismo año se da la más encarnizada lucha de toda la guerra civil, entre los ríos Amarillo y el Yang-tsé. Atacando por tras de las líneas enemigas, estableciendo ataques que dividían las fuerzas de Kuomintang en lonjas menores y frágiles delante de incontinente rojo aplastador, las fuerzas de Chiang pierden más y más abastecimientos y hombres.

En setiembre de 1948, un notable dirigente militar que había iniciado sus hazañas a los 16 años como ayudante de órdenes de Chu Teh, dispone de 600 mil soldados. Con ese contingente, Lin Piao se apodera de las guarniciones y puntos fortificados de Chiang, entre Mukden y Chinchow. En noviembre, las posiciones de Chiang son liquidadas por sucesivos, simultáneos e interminables ataques.

Que avanzan en dirección al sur de China.

Cuando llega enero, el Presidente Mao ofrece la paz, que los reaccionarios de Kuomintang obviamente recusan por que significaría una rendición. Manteniendo la demanda de paz, el ejercito rojo, todavía, sigue manteniendo el dominio de la situación y atacando. De nada vale el apoyo del imperialismo a Chiang.

Nanking, la capital de Kuomintang, cae en 13 de abril de 1949, Hankow en 3 de mayo y Shaoshing día 7. Finalmente, en 4 de diciembre, en la frontera de Indochina, 25 mil soldados de Kuomintang se entregan, mientras Chiang traidor ya se había refugiado desde el día 23 de abril en la isla de Formosa bajo la protección del imperialismo yanqui.

En 1º de octubre, el Presidente Mao Tsetung proclama la República Popular de China, en su capital Pekín.

Por todos los episodios de la Nueva China, en que los días de El Este es Rojo cupo alcanzar, el pensamiento del Presidente Mao fue el protagonista principal. Desde la fundación del Partido Comunista de China; de la creación del Ejército Rojo; del Levante de la Cosecha de Otoño, en 1927, de la liberación de China a la fundación de la República Popular.

De hecho, el Presidente Mao estableció la estrategia de cerco de la ciudad por el campo; fundo y dirigió la Republica Popular y el estilo de democracia nueva. Ultrapasando el período enfocado en la opera, la historia de la revolución proletaria mundial, en el curso de las luchas en China, no solo elevó la cuestión de las rebeliones armadas al nivel de la teoría militar del proletariado como impulsó, desde las bases de apoyo, una nueva economía, una nueva política y una nueva cultura.

El Presidente Mao estuvo al frente del Gran Salto Adelante; fue guía de la lucha contra el revisionismo y contra toda suerte de doctrinas de restauración capitalista; jefe y mando de la Gran Revolución Cultural Proletaria; estableció la contradicción como ley fundamental de la dialéctica; desarrolló la tesis del capitalismo burocrático – el capitalismo que se desenvuelve en las naciones oprimidas por el imperialismo con sus diversos grados de feudalidad.

Él desarrolló la teoría marxista-leninista del Estado (desde los tres instrumentos: el Partido, el Ejército y la Frente Única) y también en los aspectos del Poder del proletariado con base en la alianza operario campesina concentrada en los comités populares y de la lucha de clases bajo el socialismo. En el plano de la Revolución mundial, todavía que bajo los más crueles reflujos, él esclareció la cuestión de los tres mundos que se delinean y de la victoria inexorable de los pueblos bajo el liderazgo del proletariado.

La teoría de la emancipación de las clases y de la liberación nacional, bajo la óptica científica del proletariado revolucionario y, que recibió de la revolución en China, guiada por el Presidente Mao, por lo tanto no pueden ser confundidos como conveniencias de piezas de oratoria, destinados a servir a unos tantos seguidores que surgen y se van con el pasar de los tiempos. Al contrario, él tomó la práctica social de millones y millones de revolucionarios proletarios de todo el mundo (de las revoluciones que antecedieran a la de China y a la parte que le cupo dirigir) como criterio de la verdad en la búsqueda y en la construcción de una sociedad libre de la explotación del hombre por el hombre y de la existencia de las clases.

Esos aportes costaron la vida de millones, de los que derramaron su sangre, de los que sobrevivieron, de los que vinieron y vienen después, por que continuará siendo así hasta que sobre la "fase de la tierra haya un solo tipo de hombre" y esté barrida definitivamente la explotación del hombre por el hombre.