Protesto em frente à 21a DP após a morte de Fabrício de Sousa Melo
Ni en época de farsa electoral la política de exterminio de pobres da una tregua al pueblo. Al contrario, en los últimos tres meses, se registró un asustador aumento en los casos de jóvenes muertos por la policía en operaciones en barrios pobres de Río de Janeiro y de São Paulo.
En Río, según datos del Instituto de Seguridad Pública, el ISP, en julio de este año, hubo un aumento de 158% en el número de muertes en operaciones de la PM en comparación al mes anterior. Si comparado al mismo mes del año pasado, el aumento llega a 32%.
RJ: la policía más letal
En agosto, fueron 23 muertes solamente en la capital, 20 de ellas en operaciones policiales en favelas. Fueron muertos tres hombres en el Morro del Jinete, en Anchieta; cinco en la favela del Rola, en Santa Cruz; cinco en la favela de la Serrinha, en Madureira; dos en el Complejo de la Mare en una acción del BOPE (Ver BOX); un hombre murió en la favela del Arará, en Benfica (Ver BOX); y cuatro en el Morro del Dendê, en la Isla del Gobernador.
Otra víctima de la policía carioca el mes de agosto fue la niña Yasmin Moura Camilo, de 6 años. Ella jugaba en una plaza en el Conjunto de las Casinhas, en Costa Barros, zona Norte de Río, cuando policías que hacían una operación en el local habrían acertado la niña con un tiro de fusil.
– Parece que arrancaron un pedazo de mí – dijo la madre de la niña.
SP: 300% más muertes
En São Paulo, la situación no es diferente. Según datos del Instituto Sou da Paz y de la ouvidoría de la policía militar, el número de muertes en supuestos enfrentamientos con la policía han crecido asustadoramente. Solamente en el periodo entre enero y julio de este año, la policía paulista mató 271 personas, 15% de más que en el mismo periodo de 2011. El mes de mayo de este año, fueron 52 muertos, lo que representa un aumento del 13% en relación al mismo periodo del año pasado. Sin embargo, los números más asustadores son los de julio de este año, mes en el cual fueron registradas 42 muertes en operaciones de la PM solamente en la capital. El número representa un aumento del 300% en relación a julio de 2011.
El comandante-general de la PM, coronel Roberval França, dijo a la prensa que los números crecieron, pues crecieron también las operaciones de la policía contra el crimen y, consecuentemente, los enfrentamientos con criminales. Pero, mientras el número de pobres muertos por la PM crece de manera alarmante, el número de policías muertos en enfrentamiento cayó 34% en relación al 2º trimestre de 2011 y es el menor en 13 años.
Nueve muertos en un día
Desde 2009, la policía responde por uno de cada cinco casos de muertes en el estado de São Paulo. La mayoría de esas muertes es atribuida a la Rondas Ostensivas Tobias Aguiar (ROTA), la más letal tropa de la PM paulista. Comandada por el teniente-coronel Salvador Modesto Madia – uno de los acusados por la Masacre del Carandiru – la ROTA mató nueve personas en una única operación en Várzea Paulista, región de Jundiaí, el día 11 de septiembre. De los 40 policías que participaron de la acción, ninguno quedó herido.
Madre de Edson Rogério Silva dos Santos, asesinado por policías en 2006 en una estación de servicio en la ciudad de Santos, donde vivía, Débora Maria da Silva fundó el grupo Madres de Mayo, movimiento que congrega los familiares de las víctimas de la violencia policial. Ella resalta la semejanza entre los crímenes de mayo de 2006 y la actual política de exterminio de la policía de São Paulo.
– No hubo punición a los crímenes de 2006, el poder público dio carta blanca a los policías, los crímenes fueron cometidos con el consentimiento del Estado. Hubo matanzas en 2009 y también los crímenes de abril de 2010 en la Bajada Santista. Y en todos esos casos, quien se escondía bajo el capuz era el Estado. Los crímenes de los últimos meses tienen mucha semejanza con los crímenes de 2006, es un mayo continuado – analiza.
“Era un buen muchacho, estudiaba y no perturbaba nadie”
Mãe de Elizeu chora diante do caixão do filho
El día 18 de agosto, una operación del Batallón de Operaciones Especiales (Bope) de la PM de Río de Janeiro terminó con un joven muerto. Era un sábado ensolerado en la favela Parque Arará, en Benfica, zona Norte de la ciudad. La víctima, el estudiante Elizeu Santos da Silva, de 15 años, llegaba en casa de una fiesta cuando, en la puerta de su casa, fue sorprendido por policías del Bope. Al divisarlo, los policías comenzaron a disparar y balearon Elizeu en la cabeza, en el tórax y en el brazo. Llevado para el Hospital General de Bonsucesso, el joven no resistió a las heridas.
Al día siguiente, Elizeu fue enterrado en el cementerio São Francisco Xavier, en el Caju, Zona Portuaria de Río. Muy conmovido, el padre de Elizeu, el encargado de supermercado João Batista Trigueiro da Silva, de 42 años, desahogó:
– Mi esposa lanzó la llave para él entrar en el condominio. Ahí, cuando ella lanzo, y él se agachó para agarrar la llave, tiraron en el chico, cobardemente. Ellos estaban escondidos bajo la escalera del condominio. Ellos aún dieron un tiro para arriba en dirección de mi esposa para que ella no les viera el rostro. Fue un milagro que no la hayan acertado – dijo el padre del joven
– Elizeu era un buen muchacho, estudiaba y no hacia mal a nadie. Infelizmente, voy a tener que entrar con una acción contra el Estado porque fue una cobardía. Una de las mayores cobardías que yo ya vi en mi vida. Mi familia está arrasada. La comunidad también está arrasada porque fue una gran brutalidad. Todo el mundo sabía que él era estudiante. Trabajamos para dar un futuro a nuestros hijos y un policía que debería proteger el ciudadano hace eso y quita vida de un inocente. No podemos ver esa historia repitiéndose y no hacer nada. Esos policías parece que llegan a las comunidades con el diablo en el cuerpo – lamenta.
“No es justo, mi hijo trabajó la vida entera”
El día 1º de septiembre, tras otra violenta operación del Bope en la favela Nova Holanda, también en la zona Norte, habitantes protestaron bloqueando la Línea Vermelha – vía arterial de conexión del centro de Río a la Bajada Fluminense.
Según los manifestantes, policías habrían saqueado casas y asesinado dos hombres durante la operación. Entre ellos estaba Fabrício de Sousa Melo, de 18 años. El muchacho estaba próximo a un lavadero de autos cuando fue atacado por policías y alcanzado por tres disparos. El joven no resistió a las heridas y sus documentos aún habrían sido llevados por los policías. Indignados, habitantes colocaron fuego en neumáticos bloqueando la Línea Vermelha.
– Arrastraron el cuerpo de mi hermano y lo dejaron agonizando en el suelo. Cuando llegué cerca y pedí ayuda, los policías me insultaron y me amenazaron. Él aún estaba vivo cuando yo llegué, pero lo dejaron morir – contó Antônio de Sousa Melo, hermano de la víctima.
– No es justo, mi hijo trabajó la vida entera, estaba juntando dinero. Mataron mi hijo, él era un joven de bien. Mi hija vio él siendo alcanzado, intentamos, pedimos por el amor de Dios para la policía, pero ellos sólo nos insultaban y daban tiros para arriba. – dice la madre de Fabrício, Elza de Sousa, 44 años.
En total, 20 habitantes registraron queja denunciando los abusos cometidos por el Bope durante la operación. Una señora de 65 años que prefirió no ser identificada dijo que 1,4 mil reales que estaban dentro de su casa fueron hurtados por la policía durante una revista. El dinero sería usado para una cirugía.
– Estaba economizando a más de un año para hacer mi operación de catarata. Ellos reviraron todo, buscaron en toda mi casa y abrieron la cartera donde estaba el dinero – cuenta.
Los habitantes fueron a la comisaría acompañados de la directora de la organización Redes de Desarrollo de Maré, Eliana Sousa Silva. Hace 10 años en el Complejo, el grupo Redes de Maré es resultado de un largo proceso de envolvimiento de sus fundadores con el movimiento comunitario local en torno a varias luchas, entre ellas, la lucha contra la violencia policial.
– No podemos dejar eso impune, tenemos que encontrar nuevas formas de combatir ese tipo de acción. Si fuese en el barrio Leblon, o en Ipanema, al día siguiente centenares de personas estarían reunidas, protestando. Necesitamos luchar – dice Eliana.
Familia de Andreu sigue exigiendo justicia
Deise lamenta novo adiamento do julgamento
El día 12 de septiembre, una vez más fue aplazada la audiencia de instrucción y juicio de los agentes del Departamento General de Acciones Socio-Educativas, el Degase, acusados de torturar y asesinar el joven Andreu Luis de Silva Carvalho en las dependencias del Centro de Triagem (CTR) en la madrugada del día 1° de enero de 2008 (AND n° 40, febrero de 2008, Agentes de ‘rehabilitación’ torturan joven hasta la muerte).
El juicio, esta vez, fue aplazado para el día 4 de febrero de 2013, causando indignación en los familiares de Andreu que comparecieron al Fórum con la esperanza de ver la justicia punir los asesinos del joven. En la puerta del tribunal, nuestro reportaje conversó con la madre de Andreu , Deise de Silva Carvalho, de 38 años.
– Mi hijo sufrió varias barbaridades, varias formas de tortura. Yo vine aquí con la esperanza de que la justicia fuese hecha, pero el juicio fue aplazado nuevamente. Lo que más me duele es que esos hombres siguen trabajando, siguen actuando con otros jóvenes. Es ese tipo de persona que trabaja para el Estado. Y ellos se dicen agentes socio-educativos. Yo perdí mi hijo, pero no perdí mi voluntad de luchar. Yo estoy aquí también para llamar otras madres para la lucha. Porque cada vez que una madre pierde su hijo para el Estado y cruza los brazos, ella dice: “vosotros podéis continuar matando”. Solas nosotras somos débiles, pero juntas, nosotras madres somos muy fuertes. Esos monstruos tienen que salir del sistema socio-educativo. Ya son cuatro años de espera y agonía. Vamos a hacer manifestaciones para que ese juicio acontezca antes de la fecha marcada. No podemos esperar hasta el año que viene. Nosotros necesitamos ver esos hombres atrás de las rejas. Basta de esperar – protesta la madre de Andreu.
Traducciones: [email protected]