Protestando contra el alta en el precio del diesel, la paralización de los camioneros, iniciada el día 21 de mayo, contó con la adhesión de más de 300 mil. La categoría bloqueó carreteras por todo el país. Hasta el cierre de esta edición, se completaban ocho días de huelga ininterrumpidos, atropellando tres tentativas de negociación entre la cúpula y el gobierno.

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Caminhoneiros seguem protestando em ao menos 25 estados

En total, 25 estados y el Distrito Federal registraron manifestaciones durante los ocho días de huelga. En ese periodo, más de mil puntos sufrieron paralización, según datos de la Confederación Nacional de los Transportistas Autónomos (CNTA).

Después de anunciar medidas cosméticas “negociadas” con entidades que no representan la masa de los huelguistas (y que fue ignorado por los mismos), el gobierno Temer, presionado por los generales, decretó una operación de Garantía de la Ley y de la Orden (GLO) que dio permiso a las Fuerzas Armadas reaccionarias para actuar en todo el territorio nacional para concluir la huelga, del día 26 de mayo a 4 de junio. En la ocasión, Temer y su cuadrilla anunciaron que las FF.AA. actuarían de modo “enérgico”. Sin embargo, el general Eduardo Villas Bôas afirmó que el Ejército actuará para “evitar conflictos”.

La actuación “mediadora” del Ejército, a propósito, confirma los análisis que hemos hecho sobre el papel de las Fuerzas Armadas en la crisis actual. Los generales están queriendo ganar la opinión pública para culminar el golpe de Estado militar contrarrevolucionario con vistas a prevenir el levante de las masas frente al aumento de la explotación y opresión, cuyo plan ya está en marcha.

Ante la imposibilidad quebrar la huelga, Temer fue obligado a atender algunas de las exigencias de los camioneros, que impactaron directamente su política fiscal impuesta por el imperialismo. El día 27, él anunció la reducción de 46  centavos en el precio del litro del diesel por 60 días con la exención de impuestos a las grandes refinerías y la exención de pago de peaje para ejes suspensos de camiones vacíos, además de otras medidas.

Los camioneros argumentan que los cortes son insuficientes y no llegan íntegramente a los puestos de combustibles.

La Liga Operaria y el Sindicato de los Trabajadores en las Industrias de la Construcción de Belo Horizonte y Región Metropolitana (Marreta), que realizaron acciones de agitación y propaganda en junto a los choferes  en diversos puntos de la ciudad, en testimonio a AND manifestaron su apoyo a la justa huelga y apuntaron la necesidad de unirla a una “necesaria y vigorosa Huelga General con todas las categorías de trabajadores para rechazar los ataques a los derechos del pueblo”.

Reivindicaciones

Los camioneros exigen también cambios en la política de reajuste de los combustibles de la Petrobras, lo que ya fue descartado por el presidente de la empresa estatal Pedro Parente. La nueva política de reajustes, adoptada por la Petrobras en julio del año pasado, determina que los valores de los combustibles sufran alteraciones diarias que acompañen la cotización internacional del petróleo y la variación del cambio. En poco más de seis meses, el precio de los combustibles aumentó más de 120 veces, acumulando alta de cerca de 60%.

El precio medio del diesel en las bombas ya acumula alta del 8% el año. En consonancia con el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), es valor es superior al de la inflación acumulada en el año del 0,92%.

Impactos de la huelga

Varios monopolios industriales y el “agronegocio” también están siendo impactados por la justa lucha de los camioneros. El monopolio de procesamiento de porcinos y aves, Aurora, anunció paralización de la producción los días 24 y 25 de mayo en por lo menos cuatro estados del Sur y Centro-Oeste, totalizando 15 unidades industriales. El monopolio General Motors anunció paralización de algunas líneas de producción y la Ford también paralizó actividades en São Paulo y en Bahía. La Bosch, monopolio transnacional que fabrica autopiezas, afirmó también estar siendo afectado por la huelga.

Al menos 11 aeropuertos de todo el país cerraron por falta de combustible y centenares de vuelos fueron cancelados. En Río de Janeiro, Ceará y Sergipe, el precio de algunos alimentos, como frutas y legumbres, tuvieron alta por el desabastecimiento.

Aun así, el gobierno de Temer y cuadrilla prosiguen resistentes en promover la baja en el precio del combustible.

Panfleto de la Liga Operaria y Marreta

¡Viva la justa lucha de los camioneros!

El Sindicato de los Trabajadores de las Industrias de la Construcción de Belo Horizonte y Región Metropolitana (Marreta) y la Liga Operaria vienen a través de esta, traer un saludo clasista y combativo a todos los bravos camioneros de Brasil, que están en lucha contra los abusivos precios del combustible desde 21 de mayo y que siguen firmes en la lucha para alcanzar sus objetivos.

Sabemos cuan valeroso es el papel de cada camionero en un país cuyo modal de transporte tiene como base el vial y la lucha de los compañeros es dura para cumplir plazos de entrega y extraer algún logro para sostener sus familias con dignidad, principalmente con los extorsivos precios del combustible, del mantenimiento del camión y del peaje.

Los compañeros han sufrido aún más, desde sancionada la Ley 13.103/2015 (ley de la esclavitud y garrote para los conductores). Por esa Ley 13.103/2015 la jornada de trabajo de los conductores queda sin horario fijo de inicio, decreta el fin de los intervalos; aumentada de 8 horas para hasta 12 horas; pudiendo ser elevada su duración por el tiempo considerado “necesario hasta el vehículo llegar a un local seguro o a su destino”. No es considerado trabajo efectivo el tiempo en que el conductor está a disposición del empleador, durante los denominados intervalos para comida, reposo y descanso y el “tiempo de espera”. O sea, revocó la Ley Áurea, colocando condiciones precarias a la categoría.

El viejo Estado brasileño, dominado por grandes burgueses y latifundistas, sumiso al imperialismo, principalmente yanqui, está atravesando una profunda crisis política, económica, moral y ahora militar y para intentar “salvarse” está colocando en curso un golpe contrarrevolucionario preventivo, contra un inevitable levante de las masas populares, que están cansadas de esperar por promesas de oportunistas electoreros y cada vez más aumentan su rechazo a la farsa electoral y toman las calles de forma más radicalizadas.

Nuestro país es sometido a los dictámenes de una política económica que viene de fuera, principalmente del FMI, Banco Mundial y del FED (Banco Federal de los EE.UU.), que controlan el precio del dólar y someten sus colonias y semicolonias a su política de austeridad (corte de derechos) y cuentan aún con el apoyo de los monopolios de prensa, que cumplen un papel clave en la desinformación del pueblo. Luego comenzarán a hacer drama y sensacionalismo, para intentar colocar la población contra esa justa huelga. Por eso, el Marreta y la Liga Operaria reafirman el apoyo a ese justo levante y convocamos las demás categorías a seguir el ejemplo de los compañeros camioneros, para iniciar la preparación de una necesaria Huelga General, no sólo contra el abusivo precio de los combustibles, pero contra toda carestía de vida, contra todas esas “reformas” y leyes que retiran derechos de nuestro pueblo y lo coloca en situación de trabajo esclavo.

¡Preparar una huelga general con todos los trabajadores brasileños!