Quien vivió en la época, tendrá para siempre grabadas en la memoria las escenas dantescas que se siguieron a la caída de Salvador Allende. El Estadio Nacional colmado de estudiantes y trabajadores en un infierno de tortura y masacre. Pero, el régimen de Pinochet no era sólo tanque y fusil. Implementaron laboratorios para el desarrollo de métodos sofisticados de asesinato. Gas sarín, ántrax, toxina del botulismo y explosivos plásticos fueron desarrollados y producidos. Luego serían compartidos con los demás integrantes de la Operación Cóndor (1) .
Capa no DVD sobre os últimos deias de Eugenio Berrios
En la película Matar a todos son narrados los últimos días de la vida del bioquímico y agente de la Dina (2) Eugenio Berríos (jefe de uno de los laboratorios chilenos, ahora en tierras uruguayas), la estrecha colaboración entre los servicios secretos de ambos países realizando operaciones clandestinas ya en periodo “democrático” y el encubrimiento de todo en alto nivel de gobierno.
En la coproducción uruguaya-argentina-chilena-alemana, los eventos son narrados desde el punto de vista de una fiscal empeñada en desvelar el caso. Este es el único hecho fantaseado para el lenguaje cinematográfico. Lo demás, es totalmente fiel a los acontecimientos: noviembre de 1993, un hombre desesperado llega hasta la comisaría de una pequeña ciudad del litoral uruguayo clamando protección y pidiendo para hablar con las autoridades. Dice llamarse Eugenio Berríos y cuenta una extraña historia: que Pinochet lo mandó matar. Los policías desconfían de él, piensan que está loco y piden la opinión de un médico local que atesta su sanidad mental. Enseguida, dos oficiales del ejército lo quitan de la comisaría y lo hacen desaparecer. Los registros policiales son borrados. El médico que lo atendió es asesinado misteriosamente. Un periodista chileno divulga el pasado de Berríos. Las declaraciones de la esposa son descalificadas, siendo considerada loca. La opinión pública uruguaya exige explicaciones. El congreso forma una comisión para investigar el caso. Aparece una carta y una foto de Berríos, en la cual se lo ve paseando tranquilamente en Italia. Peritos de la policía corroboran la autenticidad del documento. Las investigaciones paran. Dos años después aparece el cadáver de Berríos enterrado en dunas del litoral uruguayo.
Hasta aquí es donde llega la película. Hoy se sabe que los laboratorios de armas químicas y biológicas chilenos nacieron para equipar el país ante una posible guerra con Argentina, Perú o Bolivia. Podría alcanzarse un exterminio masivo liberándolas en los reservatorios de agua de una gran ciudad. Después se especializaron en asesinatos selectivos de los enemigos del régimen en el ámbito de la Operación Cóndor. El gas sarín, un invento nazi perfeccionado por Berríos, habría sido usado para matar el ex presidente João Goulart. Muchas otras muertes de figuras destacadas tuvieron su apoyo técnico. Berríos también procesaba cocaína. Bebía, se drogaba y salía por las noches exhibiéndose. En 1991 Pinochet había dejado el poder, pero retenía el mando del ejército. Berríos había sido convocado para deponer en la investigación del homicidio de Orlando Letelier (3). Pinochet ordena que lo quiten del país por no ser confiable. Él es llevado clandestinamente, primero para Argentina y después a Uruguay, donde permanece secuestrado en la casa de un coronel. Es entonces que huye y pide ayuda en la comisaría.
Las investigaciones ocurrieron primero en Chile y bien después en Uruguay. Berríos llevó dos tiros en la cabeza siendo disparados por un oficial de cada país como forma de sellar un pacto de silencio. Varios militares fueron presos en Chile, y en Uruguay el juicio está en su fase final. Políticos no fueron alcanzados por la investigación.
Ganador de numerosos premios internacionales, Matar a todos de Esteban Schroeder, es un buen ejemplo de cine latinoamericano de calidad. Aún con bajo presupuesto, cuenta nuestra historia, concientiza y prende la atención del espectador.
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1) Operación Cóndor: alianza político-militar fascista creada para reprimir y asesinar opositores a los gerenciamientos militares de Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay, Chile y Bolivia.
2) Dina: policía política chilena
3) Orlando Letelier: diplomático chileno asesinado en Washington en un atentado a bomba organizado por el régimen de Pinochet.