A los 73 años la cantora argentina recuperada de problemas de salud vuelve a los palcos en gira internacional. Considerada "la voz de Latinoamérica", de un estilo inconfundible, nos fascina tanto por su calidad como por lo que simboliza. En su canto identificamos ansias de libertad, justicia, derechos para el pueblo, esperanza, lucha. Sin embargo diversas actitudes y posicionamientos de la estrella la distancian de esa imagen.
Cartaz do show em Israel
Nació el 9 de julio de 1935 en Tucumán provincia del norte argentino, descendiente de los indios diaguitas y de franceses. Creció en un hogar humilde y aprendió a amar las expresiones artísticas populares. En la adolescencia bailaba, cantaba, y llegó a ser profesora de danzas nativas. A los 15 años ganó un concurso musical organizado por una radio local y la contrataron por dos meses.
En los años 60 se muda para Mendosa donde se amplían sus horizontes, grava sus primeros discos La voz de la zafra (1962) y Canciones con fundamento (1965) que en la época pasan desapercibidos. En ese mismo año todo cambia, consigue consagrarse, cuando tiene la oportunidad de cantar en el Festival de Cosquín el más importante de Argentina. En 1967 realiza una exitosa gira por Estados Unidos y Europa. En los años que se siguen continúa gravando y ampliando su repertorio para todas las expresiones populares auténticas de los compositores latinoamericanos.
En 1971 encarnó la heroína altoperuana Juana Azurduy en la película Güemes la tierra en armas. En ese entonces las letras de sus canciones, sus homenajes a personalidades como Violeta Parra, Víctor Jara, su postura de apoyo a las causas de la izquierda, causaron malestar entre los militares que gobernaban en la época llegando a ser censurada en las radios oficiales.
Tras un corto y culturalmente fértil período de abertura política, en 1976 irrumpe la dictadura más sanguinaria. Mercedes continuó en Argentina aunque sus discos fuesen prohibidos y sufriese amenazas de grupos paramilitares. Hasta que en 1979, cuando se presentaba ante un público estudiantil en la ciudad universitaria de La Plata en Bs As, ella y los espectadores fueron presos. A partir de entonces solo quedaba el exilio. Primero fue a Paris y en 1980 se instala en Madrid. Su actividad artística fue intensa en esos años.
Su voz que en el comienzo de su carrera poseía un registro casi soprano, evolucionó para un dominio total de los tonos más graves y profundos con perfecta entonación y gran calidez.
Con la derrota de la Argentina en la Guerra de las Malvinas los militares son obligados a dejar el poder. Entonces en 1982 retorna a su país. Realiza una serie de 13 conciertos históricos en el teatro Opera, donde es gravado el LP Mercedes Sosa en Argentina. Luego después lota en dos espectáculos seguidos el estadio de futbol Ferrocarril Oeste sumando 60.000 espectadores. Esa época pasa a ser de profunda esperanza, donde todo un pueblo deposita sus expectativas en la efectiva democratización de la sociedad argentina. Exige que se juzguen los militares asesinos y todos aquellos que los apoyaron y se beneficiaron. Es posible soñar con un nuevo tiempo. Y en ese clima Mercedes Sosa amplia su repertorio y realiza trabajos con otros artistas sin preconcepto de género musical. Autores de diversos estilos y generaciones. El simbolismo es enorme. De allí se extienden puentes para toda Latinoamérica que pasa por momentos parecidos.
Recibo pela apresentação na Espanha (clique para ampliar)
Más de cuarenta discos, seis películas. Una infinidad de condecoraciones, menciones y reconocimientos. Por eso es que cada palabra cada gesto suyo tiene un peso enorme.
Lamentablemente ese prestigio conquistado primero ante su público y después ante todas esas instituciones no ha sido aprovechado para las causas populares. Al contrario, lo que se ha visto es un relacionamiento promiscuo con el poder establecido. Pasó a criticar a las Abuelas y Madres de Plaza de Mayo por sus firmes posiciones por la punición de los asesinos y torturadores y búsqueda de sus entes queridos desaparecidos. Apoyó políticos de derecha como Mauricio Macri involucrado en casos de corrupción y contrabando, después de que éste le prometió un museo para homenajearla. En su defensa dijo que el museo sería "para todos los argentinos". Su aproximación con los Kirshner le rindió jugosos caches pagos con dinero público.
En el mes de octubre llegó a la imprenta un recibo que correspondía al pago de una presentación oficial en España para el Expo Zaragosa 2008. Según el documento ella recibió lo equivalente a 240 mil reales. Continúa cantando sobre los pobres pero cada vez más lejos de ellos. Sus presentaciones tienden a ser en lugares reducidos con precios de ingreso prohibitivo.
Pero el cúmulo de incoherencia con su imagen de compromiso, denuncia, lucha y resistencia acontece en estos días.
Desde que anunció su agenda para octubre, donde figuraban cuatro presentaciones en Israel, numerosas organizaciones trataron de alertarla de su error. Perplejas, creían que estaría mal informada acerca de la política de exterminio de ese país, que no supiese que el pueblo palestino es continuamente sometido a un proceso de humillación, de expulsión de sus tierras, de limpieza étnica. Y que esta política de apartheid, está cumpliendo 60 años y para eso contrata artistas de renombre para mejorar su imagen en mientras ignora resoluciones de la propia ONU, la Convención de Ginebra, dictámenes del Tribunal Internacional de Haya y, principalmente, no respeta los más elementares derechos del pueblo palestino.
De nada valieron los innúmeros mensajes de ciudadanos, personalidades y entidades para que reflexionase y cambiase de actitud. En conferencia de prensa en Israel declaró estar bien informada de todo, y que había recibido los pedidos para que no se presentase allá. Dijo también que "estaba apenas para cantar y no para hacer política", "una piedra (en las manos de un palestino) es un arma que puede matar así como mata un cañón", "amo Israel porque es un pueblo que lucha", "la paz es lo único que importa".
Por eso que si en los próximos días algún trabajador, un estudiante humilde, quedar sabiendo que la leyendaria Mercedes Sosa estará presentándose en su ciudad y concluir que el precio del ingreso es impagable, no debe sorprenderse. Tendrá que pensar que aquel repertorio revolucionario es compuesto apenas de canciones. Que la diva solo quiere paz aunque sea desprovista de justicia o vida. Y que aquella Cuando tenga la tierra en este momento debe estar siendo tarareada por algún sionista mientras expulsa y asesina palestinos.