No mapa, a área onde deve ser construído o campo de golf
Hace años, que la APA (Área de Protección Ambiental) de Marapendi, en la zona Oeste de Río de Janeiro, preserva un importante bioma de mata atlántica, con una inmensa variedad de especies vegetales y animales. A pesar de los antiguos problemas con los grandes condominios de la región, que vierten sus desechos cloacales en las lagunas de la APA, las especies que viven en el local – muchas de ellas amenazadas de extinción – siempre resistieron al avance de la urbanización en el barrio de la Barra da Tijuca. Pero, una nueva amenaza ha preocupado científicos y habitantes de la región.
La aprobación de la PLC 113 en la cámara de concejales de Río en régimen de urgencia, en una de las últimas votaciones de 2012, dio la señal verde para la construcción de un campo de golf en una inmensa área de la APA de Marapendi. La construcción forma parte de los preparativos de la ciudad para las Olimpíadas de 2016 y ya es llamada de “Golf Olímpico”.
Hasta entonces, muchos movimientos y organizaciones de defensa del medio-ambiente trababan una batalla contra la PLC 113. Sin embargo, meses antes de la aprobación, ya había sido construida, según proyecto del ayuntamiento, la estación de BRT (Bus Rapid Traffic) “Golf Olímpico”, frente al área disputada por contratistas para la construcción del campo de golf. Un claro señal de que ya estaba todo arreglado entre la gestión municipal, encabezada por el alcalde Eduardo Paes, y las contratistas que irán a devastar la APA de Marapendi.
El reportaje de AND conversó con el biólogo y habitante de la región, Marcelo Mello, de 48 años, que explicó la importancia de la APA de Marapendi y denunció las obscuras articulaciones entre el Estado y las contratistas objetivando la aprobación de la PLC 113.
– Yo vivo en la Barra da Tijuca hace 10 años e intento, de alguna forma, defender la biodiversidad de Río de Janeiro. En esos diez años, yo he visto que el poder público no ha hecho nada para proteger ese bioma de mata atlántica que aún existe aquí en nuestro barrio. Existe la ley federal 11.428 que determina que la mata atlántica es un patrimonio nacional que debe ser protegido, preservado y reconstituido. Y el ecosistema de restinga, así como el ecosistema de manglar forma parte del bioma de mata atlántica, que es el más amenazado de Brasil. Por estar en el Sudeste, ese bioma viene siendo diezmado desde el descubrimiento de Brasil y, hoy, sólo restan 7% de su cobertura vegetal. Esos megaeventos, como el RÍO+20, ya acontecen desde la década de 70. En la mayoría de las discusiones trabadas en esos eventos, fue determinado un amplio esfuerzo para la preservación de esa biodiversidad, que está entrando en extinción rápidamente – analiza el investigador.
Marcelo habló también sobre la estructura de poder por detrás de los grupos que se movilizaron por la aprobación de la PLC 113 en connivencia con la base política de Eduardo Paes en la cámara de concejales y la secretaría municipal de medio ambiente.
– Y, en vez de proteger esa riqueza que está siendo destruida, el Estado está usando ese bioma protegido por ley para conseguir beneficios financieros. Están usando la mata atlántica como una moneda corriente. Ellos venden esas áreas, cambian la legislación municipal, y acaban con el bioma para beneficiar empresas hoteleras internacionales, como a Hyatt Hotels Corporation, y contratistas locales, como la Carvalho Roca y la RJZ Cyrela, además de mafiosos que se adueñan de terrenos aquí de la región, como el empresario Pasquale Mauro. Toda esa organización criminal está acabando la nuestra mata atlántica – denuncia el biólogo.
– En este local, ellos quieren construir un campo de golf, lo que exige un área muy grande. En la mayoría de los lugares del mundo, los campos de golf son construidos encima de biomas. En este bioma de la APA de Marapendi, usted tiene especies amenazadas de extinción, como la mariposa de la playa, que es una especie endémica de Río de Janeiro, o sea, ella sólo existe aquí. Ella es considerada internacionalmente el único insecto brasileño amenazado de extinción. Además de esa mariposa, usted tiene la lagartija blanca de la arena, también amenazada de extinción. Usted tiene también varios vegetales, como la Jarrinha, que es alimento de la mariposa de la playa. Esa especie vive en la restinga, que en la APA de Marapendi, ya fue devastada. Nosotros tenemos aquí también capibaras, pacas, acutíes, zorrinos, varios pájaros como la lechuza buraquera y el carancho. Esa es la fauna. En la flora, además de la jarrinha, usted tiene también la corona de frade, que es un cacto también amenazado de extinción – explica el científico.
Marcelo habló también sobre las estrategias utilizadas por los estafadores de la región para conseguir la posesión de las áreas hasta ahora preservadas.
– Esos hombres que están en el poder quieren vender esa área justamente para las contratistas. Para eso, ellos se juntan a un grupo grande de políticos, que alteran las leyes en favor de esa mafia. Enseguida, ellos comienzan a degradar esa área. Un gran problema internacional son las especies exóticas invasoras. El mosquito de la dengue es una de esas especies. Él vino de África. El caracol gigante africano es otra de esas especies. El almendro, que vino de la India, si colocado en un bioma de mata atlántica, el comienza a diezmar nuestra floresta. Conforme crece, mata el palo-brasil, mata la Caroba. También una especie mexicana que se llama leucaena que está en todos los accesos a la APA de Marapendi. Lo que los estafadores y contratistas de esa región hacen para degradar el área es plantar esas especies exóticas dentro de la APA. En tres años, esos árboles crecen y destruyen las especies nativas. Entonces, ellos van para el gobernador y dicen “Mire, esa área está degradada”. El gobernador responde ” ¿Así? Entonces, vamos a construir lo que ustedes quieran ahí” – acusa.
– Esas empresas financian las campañas de esos políticos. Y en esa pelea, la naturaleza no tiene voz. Solamente ese grupo de jóvenes estudiantes y algunos científicos se importa en defender esa área. Hay también personas que luchan contra todo que está siendo hecho en la ciudad por causa de la copa del mundo y de las olimpíadas. Todo en favor del logro y contra los intereses de las personas que viven en la ciudad. El contrato de explotación de esa área define que el campo de golf va a funcionar por 25 años. Tras eso, van a construir edificios en el lugar. Ellos van a quitar una diversidad enorme y plantar una única especie, pasto. Después, colocan media docena de agujeros para que los millonarios jueguen golf. Ellos dicen que es un campo de golf popular, pero el pueblo no juega golf. Un kit para jugar golf cuesta 20 mil reales. ¿Quién del pueblo va a pagar eso? Además, el mantenimiento de ese campo va a costar al Estado 700 mil reales por mes. Eso es lo que ellos llaman de aparcería público privada – concluye.
Protesta denuncia la farsa del “Golf Olímpico”
Manifestantes do Coletivo Resistência Popular Zona Oeste II ‘enforcam’ o gerente Paes
En la tarde de sábado, día 22 de febrero, el Colectivo Resistencia Popular Zona Oeste II y varios otros grupos organizaron una protesta contra la construcción del “Golf Olímpico”, en la Avenida de Américas, a las márgenes de la APA de Marapendi. Los manifestantes distribuyeron panfletos para quién pasaba por la avenida denunciando la destrucción del bioma de mata atlántica preservado por la APA y las sombrías articulaciones de empresarios con la gestión municipal para explotar (léase destruir) esa importante área de preservación ambiental.
Performances teatrales, pancartas, carteles y hasta el ahorcamiento simbólico de un muñeco del alcalde Eduardo Paes animaron la manifestación y llamaron la atención de quien pasaba por el local. En la ocasión, el reportaje de AND conversó con una de las organizadoras de la manifestación, la historiadora Mariana Bruce, de 27 años.
– Nuestro colectivo actúa aquí en esta región del Recreio, Vargens y Jacarepagua contra ese proyecto de ciudad que no respeta los derechos de los ciudadanos. Ese proyecto usa los grandes eventos para vender la ciudad para los megaempresários, como está aconteciendo aquí con la construcción de ese campo de golf. Quién va a construir eso es una familia italiana de la región que ya explota el barrio hace mucho tiempo. ¿Al final de cuentas, ese campo de golf es para quién? Ya existe un campo de golf aquí, que es el Itanhangá Golf Club y el dueño del club ya ofreció su espacio para las competiciones en las olimpíadas. Es mucho más interesante adaptar aquel espacio que construir otro. Sin contar que nada fue discutido con nosotros. No hubo audiencias públicas, nada. Es una presión que atropella los intereses públicos en favor de los privados – protesta la historiadora.
Traducciones: [email protected]